Conocí a Philip Glass cuando unos compañeros y yo escribiamos para un diario con noticias apócrifas llamado El Péndulo, gens quasi barbara ad pugnandum promptisima. Me tocó escribir un artículo que hablaba del virtuosismo musical del exPresidente Fox y del concierto que ofreció con su cuarteto de cuerdas en la Scala de Milán.
Así, investigué sobre compositores del siglo XX y en una desas me topé con Philip Glass y su ópera Einstein on the Beach. Supe de inmediato lo buen compositor que es Glass y lo ridículo que sería que Vicente Fox interpretara fragmentos de esta obra.
Años después me tocó ver una película llamada No Reservations con Catherine Zeta-Jones y el buen Aaron Eckhart. Resultó ésta ser una película muy complaciente, una especie de subRatatouille con los típicos enredos de la comedia romántica estadounidense. Lame, lame, lame, lame, lame! (leim) EXCEPTO POR QUEEEEEEEEEEEEEEEEEEEEE está musicalizada por PhilipGlass. ¡Cuánta emoción tan rara y tan contradictoria! Y es que a pesar de que tengo cierto placer perverso por la comedia romántica estadounidense, la verdad es que dista mucho de ser mi máximo.
Entonces, estaba yo ahí, mirando a la CatherineZetaJones y al AaronEckhart haciéndose los payasos enamorados mientras cuidaban a una niña huérfana. Pero con un fondo musical PhilipGlassoso... Qué sensaciones tan raras uno experimenta cuando pasan esas cosas que confrontan las emociones y la mismísima razón.
Después y por una recomendación indirecta, me topé con la primer película de la trilogía Qatsi (Koyaanisqatsi)
Es difícil definir qué tipo de película es Koyaanisqatsi. El imdb.com la define como documental, musical, vida moderna, dream like y demás. Yo digo que cae en el género de películas hermosas.
Me parece complicado explicar Koyaanisqatsi, no tiene una trama, tiene contrastes. De pronto es como despertar del dulce sueño a la terrible pesadilla. Es como ver un concierto de Philip Glass con harta violencia estética.
Me parece, también, un experimento harto interesante en cuanto a analizar las percepciones propias. Koyaanisqatsi es una película que muta constantemente. Esta película muta a la forma del contenedor perceptivo de quien la ve.
Usaré de parámetro esta película para ver cómo va cambiando mi percepción del mundo. Luego habrá retroalimentación y la película me mutará a mi con lo que yo descubra nuevo y así ad nauseam.
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