2009/04/29

La Influenza Templaria

Conspiraciones Falsas

Circulan y circulan en Internet teorías de la conspiración respecto del nuevo virus. Que si Obama quiere reactivar la economía, que si por la no privatización de PEMEX, que si para transmitir las misas de los domingos por TVAzteca, que si para evitar que vieramos alguna película subversiva (W), que si los boyScouts, que si el ejército de los 12 monos, que si las abuelitas, que si el bioterrorismo, que si para ocultar el supuesto romance entre Mario y Plaqueta, que para anunciar la llegada de beibiYizuz, que si los extraterrestres, que si los viajeros del futuro, en fin ad nauseam et ad infinitum.

La verdad única y que la historia debe registrar es la de la conspiración templaria.

Umbilicus Teluris

Ustedes, amables lectores, como toda persona que se haya dedicado un poquito a los estudios elevados sabe de las corrientes telúricas. Evidentemente, la ciencia las niega, pero los científicos por lo general son nacos y tienen una visión muy cuadrada y acotada de la realidad.

Desde los druidas y celtas, sabemos que estas corrientes existen y que, además, se pueden controlar si se cuenta con el conocimiento adecuado. El asunto es que, mientras que se pueden controlar a voluntad las corrientes telúricas de una localidad, no es posible controlar todas las corrientes telúricas del mundo a menos que uno esté ubicado en el OMBLIGO DEL MUNDO.

Los druidas sabían esto y este conocimiento fue adquirido, siglos después, por los caballeros del templo.

Tesoros Perdidos y Sincretismo

Todo mundo habla del tesoro de los templarios, uno que nunca se ha econtrado y que muchos dicen es el Santo Grial. La verdad es muy distinta a esto.

Recordemos, también, otro tesoro "perdido". El tesoro de Moctezuma. Todo mundo supone que el tesoro de Moctezuma era el valioso oro y las piedras preciosas. Pero nada más alejado de la realidad.

Coincidentemente, los sabios druidas también tienen un tesoro perdido. Y estudios han sugerido que este tesoro fue descubierto por los caballeros del templo en algún momento al rededor de 1291.

¿Pero, en dónde convergen estas tres historias tan lejanas geográfica y temporalmente?
Primero que nada, es evidente que los Templarios encontraron información antiquísima perteneciente a los druidas y que, de estos descubrimientos, se percataron del nexo y relación de las energías que fluyen entre La Tierra y el universo. Pero hacía falta algo que los druidas no poseían y este algo era la geolocalización del Ombligo de La Tierra. El lugar dónde todas las energías telúricas convergen y desde dónde pueden ser controladas a voluntad.

Lo que los druidas no sabían y los caballeros del templo averiguaron después, es que el llamado Ombligo de La Tierra se encuentra en lo que ahora es México. Por supuesto, los místicos mexicas estaban al tanto de estas energías y protegieron está información hasta el final. Cuándo los protoMexicanos se referían al tesoro de Moctezuma, hablaban de la localización del ombligo del mundo (Xico). Por supuesto, los españoles imaginaban un tipo de tesoro completamente diferente.

La Influenza

Todo parece indicar que, a la fecha de hoy, aquellos representantes de la hermandad templaria han decidido actuar al fin y tomar control de estas energías poderosísimas. No alcanzo a vislumbrar todo su plan, pero me parece claro que el llamado virus AN1H1 ha sido generado atificialmente usando métodos de presión de selección siguiendo las leyes Mendelianas de la genética (tenemos algunas pruebas que sugieren que Mendel era parte del grupo secreto de la hermandad templaria).

Está más que claro que este virus fue, acertadamente, soltado en México para provocar caos y permitir que los herederos de los caballeros del templo actúen con libertad.

Estamos en un parteaguas en la historia, nos estamos enfrentando a fuerzas desconocidas y formidables. Temo que, ahora que el Umbilicus Teluris ha sido encontrado por los herederos de los caballeros templarios, entremos en una época de mayor oscuridad. Se sospecha que quienes han estado planificando esta elaborada conspiración tienen pensado llevarla a cabo en 2012, que es el 700 aniversario del desmantelamiento de la orden templaria por la iglesia católica y que, coincidentemente, marca el fin del calendario Maya.

Como humanidad, confrontaremos EL reto más difícil de nuestra historia. Nuestro estilo de vida está en peligro. La libertad que gozamos puede que esté a punto de terminarse y la supervivencia de nuestra especie nunca se había visto tan amenazada. Es momento de actuar, de levantarse en una sola voz y, como si fueramos un solo golpe, atacar al enemigo genocida. Debemos prevalecer. Nunca antes ninguna especie había enfrentado un reto tan formidable. ¿Estamos a la altura?

2009/04/26

It's the End of the World as We Know It

Siempre pensé que, durante mi generación, llegaría a ver el apocalipsis. De alguna manera es emocionante pensar que en la ciudad en la que vivo pueda estar comenzando El Fin. Durante años he bromeado con mis amigos sobre cómo nos tocaría ver el fin de la civilización como la conocemos (y probablemente el fin de la especie) desde la primera fila. Y pues sí, creo que como especie tendremos una retribución justísima "por los pecados cometidos" contra La Tierra.

Sin embargo, algo que siempre esperaba ver en una situación de emergencia sanitaria, eran los cercos sanitarios en las autopistas con soldados utilizando trajes especiales de color naranja y helicópteros de combate sobrevolando los alrededores. Otra situación que me habría gustado ver es la de que cada infectado, después de morir, resucitara como un zombie. Un asunto que también creo importante y que está faltando en la circunstancia actual, es un virus más virulento. La verdad es que esta cepa de influenza no nos está matando con la velocidad que uno esperaría en un escenario Hollywoodense.

Recuerdo que cuando asistí a la brillante presentación de tesis de licenciatura de Cui, una de sus sinodales le preguntó por qué había decidido estudiar para química farmacobióloga. Y ella respondió que porque había visto una película que en México se llamó Epidemia.

De esta manera, en lo que morimos o no, se me ha ocurrido que en el mismo tono de la Semana Santa las televisoras deberían transmitir películas ad hoc a la situación de emergencia. Así, propongo que se transmitan los siguientes filmes:

The Andromeda Strain
Año: 1971
Dirigida por: Robert Wise

12 monkeys
Año: 1995
Dirigida por: Terry Gilliam

V for Vendetta
Año: 2005
Dirigida por: Wachowski Brothers

28 Days Later
Año: 2002
Dirigida por: Danny Boyle

Children of Men
Año: 2006
Dirigida por: Alfonso Cuarón

Outbreak
Año: 1995
Dirigida por: Wolfgang Petersen

Blindness
Año: 2008
Dirigida por: Fernando Meirelles

I am Legend
Año: 2007
Dirigida por: Francis Lawrence

Mimic
Año: 1997
Dirigida por: Guillermo del Toro

Resident Evil
Año: 2002
Dirigida por: Paul W.S. Anderson
(y ps toda la serie)

Hace años pasaron una película de la que Aída me habló una vez cuando andábamos de romance, sólo que no puedo recordar el título en español (por que me dijo el título en español y tenía que ver con un organismo). Como sea, esta película trata de esta mujer africana que sobrevive al virus del ébola. Luego de todas aquellas penurias que pasa para sobreponerse a la enfermedad, los doctores la usan como cura sacándole toda la sangre que pueden para inyectársela a otros enfermos de ébola. Así continúa la película hasta que ella muere. ¿Alguién más la vio, quién puede recomendarla, alguien tiene la ficha técnica básica, es documental o una historia ficticia? Quiero saber porque ciertamente me parece que es una buena recomendación para esta temporada pandémica.

En cuanto a la música que pueden escuchar en esta temporada de contención epidémica, sugiero sólo estos títulos:

It's the End of the World as We Know It de REM
The Future y Everybody Knows de Leonard Cohen

Ciertamente que hay más canciones que pueden recomendarme. De cualquier manera, con estas recomendaciones estoy seguro que pasarán una entretenida temporada de influenza en caso de que no puedan/quieran salir de sus casas y morir.

2009/04/24

La plaga

ahí viene la plaga, le gusta matar
ahí viene la plaga, te vas a chingar
y cuando está influenzando, es la peste del lugar

mis jefes me dijeron cubrebocas hay que usar
si la plaga a ti te apaña hasta te puede matar

ahí viene la plaga, le gusta matar
ahí viene la plaga, te vas a chingar
y cuando está influenzando, es la peste del lugar

vamos al seguro que ya me quiero curar
no es que sea muy bonito, pero lo puedo pagar

ahí viene la plaga, le gusta matar
ahí viene la plaga, te vas a chingar
y cuando está influenzando, es la peste del lugar

2009/04/16

Algunos Momentos SylviaPlathosos

Repensando el Mal sin Poder Leer

El último libro que leí fue The Bell Jar, allá por finales de agosto de 2008. Es absurdo que de pronto me haya hecho de todos estos libros que me emocionaba tanto poder leer (On Ugliness, Warped Passages, Rethinking Evil, On Literature y varios otros más) y nada más no haya podido terminarlos. En los más de los casos, no he llegado ni a la mitad de cada libro. Tengo una terrible apatía hacia la lectura. Ni siquiera en madrugadas como la de ahora me dan ganas de tomar este tiempo y ponerme a leer. ¿Será que después del Bell Jar me entró una SylviaPlathosidad que me hizo caer en un vórtice de aletargamientoDepresivo que concluirá con un intento de suicidio? Lo peor, es que pienso que si intentara suicidarme cometería algún tipo de omisión obvia en alguna de las acciones que se requerirían para acabar con mi vida y padecería un terrible dolor, al final no moriría y tal vez terminaría con un daño cerebral de esos que deshabilitan las funciones motrices (incluyendo el control de esfínteres).

Y como hasta la madrugada de hoy sigue atosigándome el sentimiento, le otorgo a este momento el premio Esther Greenwood como el más SylviaPlathoso de mi vida.


La Ontología de la Desconfianza Como Base de una Amistad Duradera

Alguna vez conocí a esta persona con quien solía llevarme bastante bien. Hubo momentos en que pareció que existía una interacción muy rica e in crescendo. Desafortunadamente (y, por supuesto, después de muchas cosas chingonas y algunas chafas), llegó un punto donde esta interacción se volvió imposible puesto que la persona en cuestión pretendía cimentar nuestra llamada amistad en alguna forma de desconfianza.

Creo que la parte que más me ofendió de aquella situación fue la pobreza y falta de objetividad en sus argumentos cuando trataba de convencerme de que está bien chido desconfiar de tus "amigos", mi percepción de una tremenda incongruencia en su proceder y de que mis acciones eran percibidas como "inmoralmente (Ya saben, Kant, las personas son fines no medios y ejecutar el viceversa es inmoral.) interesadas".

Definitivamente, aquél fue un momento SylviaPlathoso que aún no supero del todo. A este momento le entrego el premio Terapia Electroconvulsiva por ser uno de los momentos SylviaPlathosos más absurdos de mi vida.


El Dolor como Medio para Volver a la Realidad

Hace muchos años afloraban en mi las primeras depresiones. Fueron terribles acometidas emocionales que todavía recuerdo con cierto temor. Al principio, me percaté de que en los momentos de desesperación podía recuperar la "cordura" si me lastimaba de alguna manera. Comencé golpeando las paredes con los puños, seguí con las rodillas y pantorrillas, pero la angustía iba en aumento. Al final trataba de herirme con la punta de un compás en los brazos y en las piernas. Sin embargo, el dolor físico ya no era un canal hacia la tranquilidad emocional.

Definitivamente este momento se merece el premio Victoria Lucas como el momento SylviaPlathoso más BellJaroso.

2009/04/12

Deconstruyendo mi manera de escribir

Lo primero que hago cuando quiero escribir una entrada en este blog es elegir un tema. Trato de encontrar en mis recuerdos algo que me interese contarles. Después de pensar en el tema del que quiero hablar, hago un recuento mental de todo lo que recuerdo del asunto en particular. Si veo que es poco lo que recuerdo, me pongo a leer de vuelta las referencias de las que quiero extrapolar alguna cosa o significado.

Una vez con el conocimiento fresco, o refrescado, estructuro mentalmente mi texto. Pienso en qué partes debe ser dividido y a qué conclusiones quiero llegar. Después es cuando comienzo a escribir. Dado que mis habilidades caligráficas son subÓptimas, escribo todo en la computadora(computadora a la que otros también llaman ordenador, por si son nacos y no me entendieron).

Ya que ha llegado el momento de escribir, divido mi lienzo en las secciones que ya había pensado. Entonces, escribo palabras y frases que tienen relación con cada una de las secciones que tenía planificadas. Escribo tanto como puedo sin que haya alguna articulación o lógica específica. Son más como notas, como un bosquejo acerca de las cosas de las que voy a hablar.

Cuando al fin he llenado de notas y frases cada sección, comienzo haciendo un primer borrador. No elimino las notas, sino que las pongo entre /* */ que es cosa que se usa cuando uno escribe programas de cómputo para indicar que existe un comentario. Ahora lo que estoy escribiendo ya tiene más estructura y lleva cierta lógica aunque no es un texto del todo cuidado. De cualquier forma, hecha esta etapa concluyo que el primer borrador está terminado.

A partir de haber terminado este primer borrador, comienzo a revisar la ortografía y los detalles de lo que entiendo por estilo. Trato de que las oraciones sean más limpias, que expresen mejor lo que quiero que mis lectores entiendan. También busco agujeros negros de expresión, que considero son aquellas frases que no llegan a ningún sitio y que disuelven el sentido de lo que quería expresar. Por último, me deshago de las notas y de todo lo que haya quedado dentro de los signos /* */.

Comienzo, entonces, con la segunda versión. Arreglo y reacomodo oraciones, vuelvo a revisar la ortografía y doy una leída final a mi entrada para dar el visto bueno. Por lo general, esta es la última etapa antes de la publicación.

Es cosa que una vez publicada la entrada, siempre encuentro (o mis asiduos lectores encuentran) algunos errores que corrijo al vuelo.

Así pues, este es el proceso con el que escribo mis artículos blogueros.

2009/04/04

How does it compare?

Algo que considero constantemente en mis ensoñaciones diurnas, es cómo se compara la percepción propia con la realidad que las demás personas concensan al atestiguarme.

Recuerdo bien el momento en que comencé a tener esta tribulación filosófica. Hace algunos años, se había solicitado mi presencia para crear un sitio web para una institución que atendía desórdenes alimenticios en mujeres jóvenes. Era una asociación que promovía sus servicios para atender a personas de altos recursos económicos. Así pues, realicé el viaje hasta Las Lomas de Chapultepec y ahí nos entrevistamos con la directora y alguna subordinada.

Después de haber acordado algunas cuestiones técnicas respecto del sitio web que se habría de realizar, comenzaron a contarnos de cómo una persona puede llegar a enfermarse de la conciencia (o a percibir de manera diferente la realidad concensada), ver cosas que no están ahí y generar un desorden alimenticio para compensar una alucinación del estado de su propio cuerpo.

Yo sé que he visto cosas que "luego" no están ahí. He tenido muchas alucinaciones desde que tengo unos 24 años. De cualquier forma, esos trucos que me juega mi mente o mis ojos (o quienes están manejando el Matrix), los puedo discernir de la realidad concensada. Es decir, yo sé que cuando he visto que aquellas estatuas se mueven, es concenso de todos que las estatuas no pueden moverse. Así que, por lo general, pienso que es un truco de mi mente, de mis ojos o de quienes manejan el Matrix.

Pero aquellos que padecen de anorexia y bulimia, en casos extremos, pueden llegar a ignorar la realidad concensada respecto de su propia persona y pueden verse como personas completamente obesas.


Nos contaron el caso de una chica que deseaba ser modelo, tenía como 1.75m de estatura pero cuando ingresó a la clínica pesaba 38kg. Les dije que no comprendía que alguien pudiera pensar que estando así de delgado podría verse bien. Mi comentario estaba propulsado por una reacción hacia un hecho que afrentaba mi ideal estético, es decir, querer parecer un esqueleto no era mi idea de belleza física y pensar que alguien sintiera que se veía bien luciendo así de flaca estremecía los límites de mi capacidad cognitiva y estética. Pronto habría de descubrir cuán estrecha era mi visión en estos menesteres

La respuesta que recibí de la directora de la clínica me cimbra todavía. "Es que ella no sabe que está tan delgada". ¿Cómo demonios no iba a saberlo? ¿Acaso no se ve en el espejo? ¿Qué no está viendo que la báscula marca 38kg? WTF?

Así, después de unos segundos y mientras se me quitaba la expresión de incredulidad, la directora prosiguió explicando el método con el evaluaban qué tan mal estaba la paciente.

Lo primero que hacen es conseguirse un proyector y una pantalla. Colocan a la paciente entre el proyector y la pantalla, encienden la luz y dejan que la paciente mire su silueta.

Esta ilustración es un ejemplo de la realidad concensada (por todos menos por la chica)

Entonces, le piden a la chica que tome un marcador y que trace una línea exactamente sobre el contorno de su silueta.
Aquí se ejemplifíca el trazo que hace la chica

Luego, todo mundo se sorprende cuando la chica les dice, ¿ven lo gorda que estoy? ¡Primero muerta que gorda! Y lo que pasa es que la chica está viendo su silueta así:


Dramatización de la comparación entre la visión de la realidad alternativa y la realidad concensada


¿Cuánto de lo que vemos en nosotros mismos es percibido por los demás? ¿Qué tan equivocados consideramos que están los demás cuando desde la realidad concensada nos señalan rasgos de nuestro físico o de nuestro carácter?